sábado, 11 de junio de 2011

Adiestramiento canino basado en la etología


La etología (del griego «ηθος» ethos, costumbre, y «λóγος» logos, razonamiento, estudio, ciencia) es la rama de la biología y de la psicología experimental que estudia el comportamiento de los animales en libertad o en condiciones de laboratorio, aunque son más conocidos por los estudios de campo.

La etología es la ciencia que estudia el comportamiento de los animales, al estudio de las características distintivas de un grupo determinado y cómo éstas evolucionan para la supervivencia del mismo. Los seres humanos, también son animales, forman parte del campo de estudio de la etología. Esta especialización se conoce con el nombre de etología humana.

Los objetivos de los etólogos son el estudio de la conducta, del instinto y el descubrimiento de las pautas que guían la actividad innata o aprendida de las diferentes especies animales. Así, los etólogos han estudiado en los animales aspectos tales como la agresividad, el apareamiento, el desarrollo del comportamiento, la vida social, la impronta y muchos, muchos otros. En estado salvaje, los animales se manejan con ciertos códigos impuestos por la propia lucha por la supervivencia, por ser el más apto para dirigir una manada o ganarse el derecho a comer o a copular primero.[]

Por tanto, las técnicas de adiestramiento canino que se basan en la etología, son aquellas que consideran las conductas naturales de los perros.

El instintivismo se basa en conocer y aplicar las características evolutivas de las especies para lograr métodos pedagógicos, de diagnóstico de conductas y tratamientos de las mismas, más eficientes y naturales.

Estas técnicas, se basan en la premisa fundamental de que los dueños tienen que convertirse en los líderes de la jauría para poder controlar a sus perros. Esto se conoce popularmente como el paradigma o la teoría del perro alfa.

El paradigma del perro alfa indica que los perros establecen jerarquías de dominancia dentro de sus jaurías. Entonces, para poder mantener una relación armoniosa con tu perro, él tiene que reconocerte como el individuo de mayor jerarquía: el perro alfa.

Así, definíamos al perro como animal perteneciente a especie gregaria, jerarquizada y en la que existían individuos dominantes y subordinados. Además, siempre la hemos considerado como especie que forma grupos estables y duraderos muy semejantes a los que adopta la especie progenitora.

Con su domesticación, nuestro amigo vive en manadas mixtas inter específicas o simplemente en una pequeñísima manada formada por su dueño y él; cada uno de su especie.

El instintivismo empezó a ganar adeptos en la década de los 80. Dos de sus promotores más famosos son Jan Fennell y César Millan. Este último consiguió mucha popularidad a través de su reciente programa "The Dog Whisperer" difundido por la National Geographic.

Según algunos autores, las ideas propuestas por estas técnicas están basadas en estudios de manadas de lobos en la naturaleza. Según otros, estas técnicas son el resultado del estudio de las conductas sociales de los perros en la naturaleza.

Mucha gente se esfuerza por “comprender” a su perro, pero lo hace desde la personalidad y no desde la “perronalidad”, y tantos esfuerzos. Ellos son otra especie, y el mejor pago que podemos darles por tantos miles de años de servicio y compañía, es hacer el esfuerzo de tratarlos desde donde ellos se sentirán verdaderamente a gusto: desde la perspectiva canina.

El principal objetivo es que nuestra convivencia con nuestros perros sea desde la perspectiva de que somos diferentes especies no son “bebès”, asì que tratarlos “como perros” los hará sentir aceptados, ya que esta aceptación es la base de una manada armoniosa es el sinónimo de una “familia feliz”.

Es importante tener en cuenta que estas técnicas, por sí solas, no permiten enseñar ejercicios de obediencia o trucos. Por eso, la mayoría de los adiestradores no acepta que estas sean técnicas de adiestramiento, sino solo complementos de utilidad. Incluso es frecuente que los mismos practicantes de estas técnicas no se consideren adiestradores, sino personas que pueden comunicarse con los perros a través de un profundo conocimiento de las conductas sociales del perro y de un lenguaje corporal adecuado.

El instintivismo nos abre un panorama amplio y excitante de nuevas posibilidades a partir de la comprensión de la naturaleza del perro, la naturaleza del humano, la naturaleza de la mujer y la naturaleza del hombre, y haciendo comparaciones paralelas con otras especies podemos llegar a una clara interpretación del mundo del comportamiento animal desde el camino de la evolución.