miércoles, 15 de marzo de 2017

Yue un perro ignorado y deprimido que al ser integrado a la familia les devolvió el favor con creces.
Atendí a una chica como de 27 años que vino traumatizada porque presencio varios estados psicóticos de su hermano y tenía mucho miedo, ya habían pasado algunas semanas que no pasaba nada puesto que inicio tratamiento farmacológico aun así tenía miedo, ella vivía en la casa familiar y su hermano en uno de los cuarto junto con su esposa, me platicaba que cada uno estaba en su cuarto y que casi no había comunicación entre ellos, que sentía la casa sola y vacía y en el único momento que se comunicaron fue cuando empezó su hermano a hacer cosas ilógicas, irresponsables, a gritar que veía gentes que no existían y todos estaban tan espantados que lo llevaron al psiquiatra, después que cesaron los síntomas todo volvió a la normalidad (cada quien en su cuarto), pero ahora con angustia y miedo. Le pregunte que si tenía perro y me comento que sí pero que era de su hermano y que estaba abandonado y nadie le hacía caso y lo peor de todo era mordelón, no se dejaba acariciar, siempre estaba solo y casi todo el día dormía, le pregunte si alguien lo sacaba a pasear y me comento extrañado NO es de mi hermano el que se haga cargo de el, y le dije te puedo pedir un favor la cual ella asintió, puedes sacar al perro a pasear por lo menos 3 veces al día, eso te va a tranquilizar porque estas unos minutos fuera de casa, haces ejercicio y también le puedes pedir a tu mama que te acompañe, ella extrañada ¿mi mama?, hay días que no la veo ni siquiera sé cuándo está en casa, bueno no pierdes nada con preguntarle. A la siguiente sesión la vi muy relajada y contenta y me platico que crees le pregunte a mi mama que si me acompañaba a sacar al perro y me dijo que sí y nos fuimos caminando por la cuadra y nos encontramos algunos vecinos que hace años no veíamos y nos pusimos a platicar, al día siguiente quien me pidió que sacáramos al perro fue ella, y durante el camino fuimos platicando, me encanto porque tenía mucho tiempo que no conversaba con mi mama y las 2 sabíamos muy poco de nuestras vidas y fue muy bonito me gusto, al otro día mi hermano pregunto por su perro no lo veía ya que siempre estaba recostado al lado del sillón y de repente el perro se acercó a él le movió la cola y le lamio la mano, el yo creo que pensaba (este no es mi perro) se sentó en el sillón y lo acaricio durante un tiempo hasta que los 2 se quedaron dormidos en la sala, nunca había pasado eso, Yue era huraño y no se acercaba a nadie y de repente quería jugar, mi hermano sigue distanciado de la familia pero ahora de vez en cuando baja a la sala a ver televisión junto a Yue. Me siento más tranquila, duermo un poco mejor y ya no estoy tan preocupada por mi hermano, creo que los medicamentos le han ayudado mucho. Me dio gusto por ella porque si los medicamento son indispensables en una persona con una enfermedad mental pero no se dio cuenta de que Yue había ayudado a acercar a la familia y que además que el perro estaba deprimido porque era ignorado por toda la familia y de repente lo integraron y él les devolvió el favor con creces.

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